No es nacionalismo, pero si tenemos que apoyar lo nuestro. Lo nuestro en todo sentido y, en mi caso, sobretodo lo gastronómico. Acá tocamos una película de bajos recursos y poca sustancia en el guión, pero de igual manera hay que verla. Ya no en el cine, ya que es de hace un par de años, pero por lo menos seguir con el hecho de hacer historias de lo cotidiano, de lo vulgar y sobretodo del drama social que tanto nos ataca.
"A mi me gusta" protagonizada por Monica Pascualotto y Jonathan Ashford del novel director Ralph Kinnard nos muestra la típica historia de amor casi imposible entre una linda chica y un exitoso personaje.
Es que tenemos demasiado metido en la sangre y en la memoria el tema noveslístico (quizás por delia Fiallo, por la Lupita Ferrer o quien sabe Dios porqué?) de las injusticias amorosas, de como la pobre y desamparada mujer no es correspondida al amor de sus sueños y al final se vuelca la historia en sólo éxitos y gracias hacia dicha chica.
Lo simpático de este cuento es que la aprendiz de cocinera le entra a su amor por la barriga y nuestras sapiencias sápidas, dejando muy en alto esa diversidad increíble que tenemos en nuestro paladar, recetas y tradición.
Hay un viaje que hacen hacia la playa donde sale una de las elaboraciones que a mi juicio representa de mejor manera nuestra idiosincrasia. El Sancocho lo veo como nuestro máximo representante donde entre verduras e hierbas se unen con las proteínas animales que queramos o tengamos a mano.
Hecha en ollas o hasta en latas de aceite, a la orilla de un río o en la mejor de las cocinas...
Vean esta peli que por simpatía hace alegrar y mostrarnos esa cotidianidad que hemos pasado desapercibido y desvalorado-
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