jueves, 30 de noviembre de 2006

¿Por qué escogí el bledo?

Quería hacer un poco de juego con las palabras y los refranes populares que tanto hemos escuchado alguna vez. Solemos decir que "no nos importa un bledo" cuando algo es casi insignificante para nosotros o queremos desprestigiarlo.
Que grave y bravo error!
Creo que pocas cosas han sido tan valiosas en la cultura latinoamericana, refiriéndonos a los alimentos, como lo és y ha sido el amaranto, bledo, caracas, pira o demás nombres por lo que se conoce a este cereal. Por cierto, no por nada se conocía en el México Azteca como alegría.
Este casi milagroso grano, que para los Aztecas e incluso los Incas era considerado sagrado, todo lleno de proteínas llegó a estar casi en extición gracias a la colonización española en esos tiempos. Considerado pecaminoso y pagano por ser usado en forma de harina junto con sangre y miel en ritos y ceremonias, se trató de extinguir y erradicar, solo siendo salvado
por los más osados agricultores indígenas de las altas montañas. En Venezuela no solo fue muy importante nutricionalmente, sino que le dio el nombre a la que hoy es su capital. Hay una referencia de 1578 hecha por el Gobernador Juan de Pimentel, que alega que los indios que aquí habitaban consumían en gran manera Bledo, los cuales llamaban en su lengua "Caracas", dando así el nombre a la tierra que moraban.
Tal era la ignorancia, que fue llevado a Europa solo con fines decorativos
y solo siendo considerado alimento por los países asiáticos.
Ha resurgido como el ave fénix, en parte gracias a investigadores estadounidenses que durante la década del los ochenta pusieron al descubierto y a la luz pública todo sus altísimos contenidos nutritivos.
Quizás son pocos los que valoran y conocen esta maravilla, aunque gracias a grandes y renombrados chefs a nivel mundial, se está usando cada vez más en recetas de grandes platos en sus restaurantes llenos de estrellas michelin. Ojala por esta vía penetre y sea más distribuido y usado, con lo cual podría ayudar a eliminar gran parte de la desnutrición mundial.

Gracias!

Confieso no haber pensado tener tan pronta respuesta a la creación de mi blog. Gente amiga y cercana y unas a las cuales he tenido contacto solo por internet, han escrito palabras de aliento. Muchas gracias!

miércoles, 29 de noviembre de 2006

Primeras palabras

Luego de algún tiempo de pesarlo, de dar vueltas en qué escribir, de qué nombre ponerle, he abierto y creado mi blog.
Llevo algunos años dedicado a la cocina, parecieran una eternidad, pero me han pasado felíz y relajadamente. Puede que suene un poco extraño si vemos todo el caos, stress y demás complicaciones que suceden, pasan y seguirán pasando en todo lo que gire y esté alrededor de las cocinas, no importa si es de un restaurante, hotel, posada, casa, etc.
Desde que entré por primera vez en una cocina profesional, de un restaurante, quede impactado, asombrado e increiblemente atraído.
Fué en una de corte muy francés, como dicen los canones de la gastronomía!, era mi primer contacto con el fuego salvaje, con brigadas enormes en donde más de la mitad ni español hablaban, en donde quemadas con vapor, cortadas con enormes y filosos cuchillos, eran cosas normales, cotidianas y hasta necesarias para irse creando de a poco un espacio y respeto entre los demás colegas.
Confieso que mis primeros días recibí empujones y apartadas, ya que al querer aprender estaba en el ojo del huracán y era más lo que estorbaba. Me llegué a sentir hasta un poco inútil. Lo buen es que como oficio, uno termina aprendiendo rápido y desenvolviendose casi como un experto en poco tiempo.

Luego de pasar por varias cocinas con diversos y muy distintos chefs, creo que he encontrado el tipo de cocina que me gusta, que me llena y me identifico plenamente con ella... es una donde prevalece lo natural, con muchas hierbas, flores, frutas y por supuesto pescados. Muchos pescados y frutos del mar!
Me encanta el poder tener avances tecnológicos que ayuden, acorten tiempos,en fin, que nos hagan un poco más fácil y llevadera toda la carga de este trabajo, pero creo que no debemos olvidarnos de lo esencial y más importante en toda esta profesión y es que debemos o tenemos la oportunidad de obsequiar placer a parte de nutrir y llenar de vida a nuestros comensales.
Trabajo y lo he hecho en cocinas super equipadas, pero también en otras con casi lo mínimo para realizar platos que traten de sorprender, por ello esta en cada uno el buscar su identidad y lograr llegar al tan deseado estilo que todos soñamos tener alguna vez, ese que muchos, por no decir casi todos, hemos copiado de los grandes alguna vez en nuestras vidas profesionales.