Sin querer caer en repeticiones ni mucho menos, traigo a la mesa, de nuevo, un portal que me encanta y gozo de leer; es que "glotonia" es un placer de chequear y revisar a menudo. En estos días han publicado un par de escritos referentes al "steak tartar" o lo que suponga ello, siempre vinculado a lo dramático y sangriento que comer carnes crudas significa. Más de una vez hablando con amigos y colegas nos hemos hecho la pregunta de cual parte del cuerpo humano sería mejor comer y como cocinarla, si es que hay que darle algún tipo de tratamiento, quizás ésto muy influenciado por esa serie de películas y libros con personajes como el gran Hannibal Lecter entre otros.
Hasta canciones pegajosas se han hecho sobre el tema (recuerdo la de Bacalao Men y el come gente, haciendo gracia a un tema real y nada jocoso ocurrido en Vzla.), por lo que creo que el comernos los unos a los otros siempre ha estado cargado de morbo y tabú, más no se le ha alejado de nuestras mentes más impuras o pensamientos oscuros.
Les dejo un extracto de este par de relatos y recomiendo leerlos enteros, ya que son de no perder.
A comer!
! "El hombre es el más curioso de los animales, pienso. Ha descubierto la cocina y considera la muerte un arte, incluido el enterramiento, una auténtica ceremonia cargada de hermosas imágenes mechadas con el más terrible de los ruidos: el silencio. El verdadero enigma es saber porqué nosotros, que vivimos en un mundo preocupado constantemente en la producción masiva de cuerpos para los campos de combate, consideramos a los humanos buenos para matar pero malos para ser guisados. Yo no tengo agallas, me digo rechinando los dientes, no sería capaz de cocinar a un semejante. Aunque pensándolo bien, lo guisaría si me lo dieran deshuesado. Entonces sí lo haría"